sábado, 14 de enero de 2012

LOS OJOS EN VUESTRO ESPOSO



Detalle de un caliz, en oro y plata con esmaltes,obra de un orfebre de Siena, s. XIII.

En las páginas dedicadas al Camino de Perfección, escrito por santa Teresa, iremos sacando detalles de

este caliz



Dios llamó a Teresa para consagrarse a su servicio en la vida religiosa. Y a lo largo de sus ventisiete años viviéndola en la Orden del Carmen Calzado en este monasterio de la Encarnación, sintió otro llamamiento a vivirla con más perfección. Por eso fundó la Orden del Carmen Descalzo, y su primer convento de san José en Ávila. Una nota distintiva fue ser pobres, radicalmente pobres. Y todo por imitar a su Esposo, que no tuvo donde reclinar su cabe, naciendo entre pajas y muriendo en la cruz.


Pobres ella y sus trece monjas de san José ¿hasta qué extremos? Escogiendo libremente ser pobres en todo: eligiendo una casa chiquita y sin adormos, en vestir hábito de sarga, calzando zapatillas de esparto con los pies desnudos y no tener nada propio ni renta de ningún género, confiando cada día en que su Señor moviera el corazón de alguien que les dejara en la puerta la comida del día. ¿Y si no vimiera nadie? Si por ser pobres de verdad, tienen que morirse de hambre, pues se gozarían en dar la vida por contentar a Dios de esa manera.


Descubrimos la radicalidad de Teresa en este punto con unas características indescriptibles.La escuchamos:


"Los ojos en vuestro Esposo; El os ha de sustentar; contento él, aunque no quieran ( los de la calle), os darán de comer los menos vuestros devotos, como lo habeis visto por experiencia".

"Si haciendo vosotras esto, muriéreis de hambre, ¡bienaventuradas las monjas de san José!.Esto no se os olvide, por amor del Señor, pues dejais la renta, dejad el cuidado de la comida, si no, todo va perdido. Los que quiere el Señor que la tengan, tengan enhorabuena esos cuidados, que es mucha razón, pues es su llamamiento. Mas nosotras, hermanas, es disparate"-

"Cuidado de rentas ajenas, sería estar pensando en lo que los otros gozan. Ved que, por vuestro cuidado, no muda el otro su pensamiento, ni se le pone deseo de dar limosna. Dejad ese cuidado a quien los puede mover a todos, que es el Señor de las rentas y de los renteros. Por su llamamiento vinimos aquí; verdaderas son sus palabras, no pueden faltar; antes faltarán los cielos y la tierra".

"No le faltemos nosotras, que no hayais miedo que falte; y, si alguna vez os faltare, será para mayor bien, como faltaban las vidas a los santos cuando los mataban para el Señor, y era para aumentarles la gloria por el martirio".

"Mirad, hermanas, que va mucho en esto, muerta yo, que para esto os lo dejo escrito; que, mientras yo viviere, os lo acordaré, que por experiencia veo la gran ganancia: cuando menos hay, más descuidada estoy, y sabe el Señor -a mi parecer- que da más pena cuando mucho sobra, que cuando nos falta. Como ya tengo visto, nos lo da enseguida el Señor"( CP 2, 1-3).


Teresa nos conmueve por su fe y cconfianza absoluta en Dios.¡Ya se explica! Teresa lleva dentro una santa, fuerte, viva, contagiosa, sin saberlo. Tan libre, tan contenta , tan sin nada, tan feliz, porque así lo tiene Todo. Adios. amigos. Hasta la próxima, Un saludo. Nicolás

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